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Todo lo que necesitas saber sobre el interés fijo

Las hipotecas de interés fijo son una de las opciones más buscadas en la actualidad a la hora de financiar la compra de una propiedad. A continuación, te vamos a contar todo lo que debes saber sobre ella.

Las hipotecas de interés fijo son una de las opciones más buscadas en la actualidad a la hora de financiar la compra de una propiedad. A continuación, te vamos a contar todo lo que debes saber sobre ella.

¿Qué es una hipoteca y qué tipos hay?

Antes de definir los tipos de interés, es necesario saber de qué hablamos cuando hablamos de hipoteca. Cuando se solicita un préstamo bancario con el que se busca comprar una vivienda, el banco suele pedir generar una hipoteca. La hipoteca se define como un derecho que vincula la propiedad de un bien para poder garantizar el cumplimiento de una obligación que se ha adquirido.

Entonces, cuando hablamos de hipoteca, estamos hablando en realidad de un préstamo hipotecario que permite financiar la compra de una casa a través de la vinculación del propio inmueble como garantía de pago para la entidad financiera.

En la actualidad, existen diferentes tipos de hipotecas. Una de sus divisiones más comunes tiene que ver con su tipo de interés. En este sentido, podemos hablar de hipotecas fijas, variables y mixtas. Hoy, nos centraremos especialmente en la hipoteca de interés fijo, que es aquella en la que se aplica la misma cifra de interés a lo largo de toda la duración del préstamo, a fin de que la cuota a pagar sea siempre la misma para el solicitante. Esto la diferencia del tipo variable, donde el interés se compone por un tipo de referencia -que suele ser euríbor– y donde las cuotas mensuales suben o bajan de acuerdo con cómo ese índice se modifique.

¿Cómo funciona una hipoteca de interés fijo?

Siguiendo lo mencionado con anterioridad, podemos decir que, cuando se trata de una hipoteca de interés fijo, el solicitante que recibe el dinero debe pagar una cuota mensual que es fija a lo largo de toda la vida que el préstamo tenga.

Ello, independientemente de los movimientos que pueda hacer el euríbor. De esta manera, el propietario sabrá, desde el momento de la firma de la hipoteca, cuánto es lo que debe pagar todos los meses en adelante y hasta que el préstamo termine, pudiendo proyectar cómo realizar los pagos y tener tranquilidad de que no habrá sorpresas en esta área.

Beneficios de las hipotecas a interés fijo

El interés fijo suele ser una de las opciones más demandadas a la hora de buscar una hipoteca. A continuación, vamos a contarte acerca de los principales beneficios que tiene para ofrecer:

Cuotas iguales

Sin lugar a duda, el interés fijo es una de las mejores opciones para quienes buscan tener la seguridad de que pagarán siempre lo mismo, debido a que es una alternativa en la que las cuotas se mantienen constantes. Esto quiere decir que el usuario sabe, al momento de firmar, cuánto es lo que va a pagar por mes, cantidad que se mantendrá estable a lo largo de toda la vida del préstamo.

Esta particularidad representa una gran diferencia respecto de las hipotecas de tipo variable, debido a que estas están referenciadas al euríbor, modificándose su precio de acuerdo con cómo este se vaya moviendo en cada momento. En cambio, en la hipoteca de interés fijo el precio es constante y no se ve atado a modificaciones externas.

Costes más bajos

Es importante destacar que las hipotecas a interés fijo suelen tener intereses más elevados que las de interés variable. No obstante, son los plazos de amortización los que ayudan a resolver esas diferencias, debido a que los períodos de los préstamos fijos tienden a ser más cortos. Al pagar en menos tiempo, la cantidad de intereses que se abonan también se reduce en el largo plazo.

Desventajas de las hipotecas a interés fijo

A pesar de los beneficios mencionados con anterioridad, también existen ciertas desventajas que se deben tener en cuenta a la hora de optar por una hipoteca de interés fijo o hipoteca fija. Las más importantes son:

Los intereses suelen ser más altos

Ya hemos dicho previamente que, al devolverse en menos tiempo, la diferencia entre lo que se paga de interés entre una hipoteca fija y una variable no suele ser mucha. No obstante, lo cierto es que, al momento de empezar, los intereses de la hipoteca fija suelen ser más altos si se compara con el interés variable. Además, al ser una cuota estable, si el índice de referencia baja durante la duración del préstamo es posible que se estén pagando números más altos.

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